Desarrollo Orientado al Transporte: una evaluación de tendencias y oportunidades para América Latina

En los últimos años, el Desarrollo Orientado al Transporte (DOT) ha incrementado su aceptación debido a su gran potencial para guiar ciudades hacia futuros más sostenibles. Esta fructífera coordinación entre las inversiones de una ciudad en transporte público y su estrategia de desarrollo del suelo ha permitido una mejor accesibilidad, una mayor capacidad de caminabilidad y un uso mixto del suelo alrededor de las áreas de transporte. Esta nota técnica revisa el DOT en varias escalas para comprender las tendencias, oportunidades y desafíos para su desarrollo e implementación, con un enfoque en generar lecciones para América Latina. Primero, el documento analiza la experiencia global con DOT, incluidas sus características e impactos, como el comportamiento de los viajeros, el número de pasajeros y los beneficios ambientales, así como las áreas de mejora. Los desafíos identificados incluyen la controversia en torno a la propia definición de DOT; posible desplazamiento de residentes vulnerables e inquilinos comerciales; el momento del desarrollo; la ausencia de un marco legal que habilite las regulaciones y herramientas de DOT; el uso efectivo de incentivos y la recuperación del valor del suelo; y el impulso involuntario de su expansión. La publicación incluye la revisión de cuatro casos de estudio que destacan las respuestas innovadoras a algunos de los conflictos abordados; estos son Seúl, Bogotá, Vancouver y un estudio de varias ciudades para evaluar el estado de madurez del mercado del DOT. Después de la revisión, quedó patente qué, aunque en algunos casos se tuvo éxito, en otros, se pusieron de manifiesto oportunidades perdidas. Finalmente, habiendo identificado los atributos clave de los casos de DOT exitosos –y los enfoques exitosos para lograr los DOT-, la nota técnica incluye ocho recomendaciones para la implementación efectiva de los DOT dirigidas a las ciudades de América Latina. Si bien persisten desafíos, la evidencia revisada sugiere que la coordinación del desarrollo territorial y el transporte debe combinarse con la coordinación del liderazgo institucional público y privado en el esfuerzo por lograr una ciudad sostenible.